C.D. Mirandés B 1–2 C.D. Beroil Bupolsa
Derrota por la mínima injusta a la vista del esfuerzo de los rojillos sobre el césped.
No pudo ser. Era, a priori, un choque complicado frente a un rival de la parte media de la tabla que no arrastraba una buena racha y necesitaba volver a ganar. Pero los rojillos, por su parte, ansiaban igualmente la victoria y como tal lo demostraron.
La primera parte del encuentro no fue demasiado atractiva para el espectador en lo que a ocasiones se refiere. Las aproximaciones a uno y otro área fueron más bien tímidas y escasas como para que los primeros 45 minutos hubiesen terminado sin goles. Pero la mala fortuna volvió a acompañar al C.D. Mirandés B que vio batida la portería de Moussa justo antes de encarar el túnel de vestuarios.
La salida, en cambio, no pudo ser mejor. En el minuto 49, el marcador volvió al origen y las tablas se instauraron de nuevo en el derbi burgalés. Álex hacía el tanto de los rojillos tras recibir un balón peinado de Samu que le dejaba con el cuero franco en el área para no desaprovecharlo. Minuto 49, 1-1. Poco duraría la alegría en los locales, sin embargo, que se verían obligados a reponerse de nuevo tras el tanto visitante diez minutos más tarde. De nuevo a remar.
Y remaron, pero no fue suficiente y el minuto 90 tardó poco en echarse encima.
