“Quiero ganar”

Ganar. Fue lo que más se repitió hoy en la sala de prensa en la previa habitual del entrenador con motivo, una semana más, del partido más importante del año. El que servirá de colofón en el feudo rojillo: “Es la despedida de Anduva con nuestra gente, la que ha estado a un nivel sobresaliente durante toda la temporada. Y el domingo queremos que se sientan orgullosos de nosotros”, reconocía el técnico, Borja Jiménez. Para eso, en el vestuario no se piensa en otra cosa que no sea la victoria, más allá de resultados y, sobre todo, más allá de un partido de vuelta que aún queda lejos en el calendario y del que nadie quiere oír hablar ahora: “Ahora nos ocupa Anduva. Quiero ganar, sobre todo ganar. Si es con portería a cero mejor, pero quiero ganar y vamos a salir a ganar”, repitió en varias ocasiones el entrenador.

Será la última batalla de un estadio, el rojillo, que solo ha caído una vez esta temporada, ante el Club Deportivo Vitoria y que, por tanto jugará una vez más a favor de los intereses locales. Rugirá como nunca. Rugirá como siempre. “Desde aquí quiero hacer un llamamiento a toda la gente que creo que el equipo después del año que ha hecho se merece que vengan a apoyarles, que vengan pronto y que sientan el cariño de todo el mundo desde el principio, desde el calentamiento o desde cuando sea, pero creo que se lo han ganado a pulso”, afirmaba a la par que se dirigía mirando a cámara a toda la afición. Recordaba, asimismo, las palabras de muchos de los jugadores que han ido apareciendo en las redes sociales del Club de aquella histórica temporada del ascenso a Segunda División A: “Les escuchaba esta semana hablar de que los 20-25 primeros minutos fue un avasallamiento precisamente por la gente. Pues vamos a intentar buscar ese calor de la gente desde el inicio para tener esas sensaciones durante todo el encuentro”, concluía.