Un mal día condena al C.D.Mirandés (1-3)
Los rojillos se vieron superados por un Málaga C.F. que golpeó en los momentos clave del choque.
No salieron las cosas en Anduva. El C.D. Mirandés no encontró su sitio en un partido en el que se vieron superados por un Málaga C.F. que castigó en los minutos claves.
Los rojillos no lograron ser el equipo reconocible que había mostrado en las dos primeras jornadas. El empuje habitual de los jabatos se quedó escaso ante un Málaga C.F. que supo aprovechar cada error para penalizar a los rojillos.
El primer gol se hizo esperar y llegó en un momento siempre delicado, al filo del descanso. Javi Jiménez aprovechaba un balón suelto en el área para mandar el esférico a la red y hacer el primero. El mazazo se hacía sentir en el verde y también en la grada antes del descanso.
Con la idea de dar un paso adelante, los rojillos salieron de vestuarios tratando de mostrar la valentía y atrevimiento que marcan sus señas de identidad. Pero el ímpetu renovado volvía a chocar frontalmente con una jugada de estrategia en la que Rubén Castro sorprendía a la zaga para hacer el segundo gol malacitano.
La adversidad del resultado no dejó fulminado a un C.D. Mirandés que movió banquillo y buscó recortar distancias para meterse de nuevo en el partido. El equipo se venía hacia arriba pero no encontraba situaciones claras de gol. Hasta que en el minuto 71 Genaro derribaba a Raúl García de Haro y cometía penalti. El propio delantero lo transformaba para recortar distancias y devolver la esperanza.
Sin embargo la alegría no duró demasiado. El Málaga C.F. volvió a castigar en un momento clave. Dos minutos después Fran Sol hacía el tercero al contrataque tras un error rojillo en la fase de creación. 1 a 3.
Con el nuevo mazazo el C.D. Mirandés no vio la manera de volver a ver portería y sus acciones se quedaron bloqueadas una y otra vez por la muralla visitante.
Al final, primera derrota en Anduva y turno de pensar en la cuarta jornada para buscar la primera victoria del curso.
