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ACTUALIDAD

Málaga C.F. 0-1 C.D. Mirandés

Épica rojilla que supera por segunda vez en esta vuelta de dieciseisavos de final de Copa al Málaga C.F. y estará en el sorteo de octavos de mañana

Noche de ilusión, sentimientos, épica y fútbol. La Rosaleda se presentaba como el escenario perfecto para certificar la superioridad mostrada por los rojillos hace 15 días en Anduva. Un campo de Primera, un rival de Primera y una victoria del Segunda División: el C.D. Mirandés.

Arrancaba el encuentro algo incómodo para os visitantes. El cuero era casi en su totalidad posesión de los malagueños que movían a su antojo de lado a lado aunque, también es verdad, sin demasiada verticalidad. Una posesión posicional, sin dinamismo en sus pases ni tampoco en sus movimientos de desmarque. Así pues, los rojillos esperaban la suya y se abalanzaban a la contra en cuanto robaban el balón de medio campo para delante. Así llegó el primer susto para los de Javier Gracia, en una pelota atrás servida por Carlos Moreno que acababa en córner in extremis. También los visitantes habían sufrido el primer arreón blanquiazul con un remate también a la salida de un saque de esquina que acertó a atajar Raúl, bien colocado como suele ser habitual. El ritmo del encuentro crecía por momentos, pero lo hacía por fases sin que la superioridad de los locales tuviera constancia alguna. Ortiz se mostraba una vez más sólido y seguro atrás para llegar al suelo y rebañar un esférico en botas de Santa Cruz que ya se preparaba para engatillar a puerta. Los rojillos aguantaban los envites pero no se encontrabana cómodos. No demostraban su juego y abusaban de balones en largo muy difíciles de bajar para Abdón Prats que tenía pegadita siempre la marca de Albentosa. Pese a todo, las acometidas de los malagueños eran esporádicas y no hubo ocasión clara antes de que el colegiado indicase el camino a vestuarios.

La salida posterior al césped, tras quince minutos de reflexión entrenador-jugadores jugadores-entrenador fue muy diferente. Los rojillos habían conseguido contener a los locales durante los primeros 45 minutos y ahora les tocaba a ellos lanzarse al ataque. Cierto es que la ventaja de la eliminatoria correspondía a los de Carlos Terrazas con este 0-0, pero buscaban el partido. Dicho y hecho. El lavado de cara fue patente. Comenzó el juego combinativo del que hace gala el C.D. Mirandés y que le ha dado ya muchos puntos en la competición liguera, sea jugando en casa o a domicilio. Moreno se ofrecía para ayudar a Lázaro en las labores de creación, Provencio hacía lo propio cuando tenía que conectar con Vélez en la mediapunta y los extremos se pegaban a la línea de cal para ensanchar el campo y hacer más difícil la defensa rival. El partido estaba en la manija de un C.D. Mirandés que iba a por el gol. Cantero daba entrada a Álex García en banda izquierda y Sangalli dejaba su puesto a Lago Junior para meter más mordiente, velocidad y frescura si cabe en la delantera rojilla. Los minutos pasaban y la comodidad de jugar con la eliminatoria a favor parecía dar aire a los visitantes en detrimento de unos locales que apenas se esforzarían por llegar con peligro al área de Raúl. Así que lejos de especular, Lago Junior arrancaría el éxtasis del casi centenar de aficionados mirandeses desplazados a las gradas de La Rosaleda con una volea magnífica de zurda en el minuto 72 para echar por tierra cualquier presión de última hora. Se instalaba un 0-1 en Málaga que obligaba a los blanquiazules a endosar dos tantos al C.D. Mirandés para forzar la prórroga. Y realmente tuvieron su ocasión, al menos una, en un remate de Juan Carlos en el segundo palo entrando por la banda izquierda que se marchó desviado por poco. Fue el minuto 90 y ni siquiera esa ocasión entraría. Los rojillos no le habían perdido la cara al encuentro en ningún momento y no dieron tregua en los 94 minutos que duró el encuentro.

Al final el premio justo, la recompensa adecuada y la felicidad compartida. El C.D. Mirandés superaba su primer emparejamiento contra un Primera División con sendas victorias en ida y vuelta, por lo que estarán en el bombo de este viernes para esperar qué ‘bolita’ les depara los octavos de final de la Copa de S.M. El Rey.