Este C.D.Mirandés quiere ir a por más (0-1)
Los rojillos se impusieron a domicilio al Rayo Vallecano con un gol de Cristo González para sumar la importante cifra de 47 puntos a falta de 9 jornadas para el final.
Victoria de mérito del C.D.Mirandés en Vallecas ante el Rayo Vallecano en un partido muy completo que los rojillos resolvieron ya en la segunda parte con el gol de Cristo.
El ritmo fue muy alto durante todo el partido, que ya en la primera parte vio como en ese ida y vuelta que se planteaba se vislumbraba una oportunidad de sacar algo positivo de un feudo del que siempre se ha ido con botín el C.D.Mirandés en Segunda División.
Corría mucho el balón sobre Vallecas, que apenas concedía centésimas de segundo para controlar y pensar rápido sobre el verde en cada acción. Había que actuar rápido y hacerlo además con precisión, sin fallos. Porque de lo contrario, en dos pases, Álvaro colaba un centro medido para que al contraataque Pozo se plantase sólo ante Liozain y cerca de ver gol. Salvó el portero canario.
Las imprecisiones fueron las grandes protagonistas de esas grandes ocasiones de los primeros 45 minutos. Sin restar importancia, claro está, a una brillante combinación entre Pablo Martínez y Caballero, que el madrileño ya en boca de gol no lograba transformar en su intento de cruzar ante Dimitriesvki. Acertó el macedonio metiendo la mano abajo.
Fue la ocasión más clara de los rojillos, que siguieron intentándolo desde la larga distancia con un activo Javi Muñoz, que probaba en repetidas ocasiones desde lejos.
Así concluía una primera mitad que deja el poso de que todo estaba abierto, de que todo podía pasar y de que, como acostumbran los rojillos, la motivación iba a llevar al equipo a competir hasta el último segundo del partido por la victoria.
Y el carácter jabato salió nuevamente a relucir en la segunda parte. Con un C.D.Mirandés que fue de menos a más. Sintiéndose poco a poco más capaz y cercano al gol. El que valiese para sellar una nueva victoria a domicilio y dejar muy encarrilado el objetivo de la permanencia.
La primera ocasión fue sin embargo vallecana. Balón desde la derecha que encontraba a Álvaro, quien sorprendiendo a la zaga picaba sobre la salida de Lizoain. Vivian despejaba bajo palos y mandaba a los suyos arriba.
Fue un espejismo, porque a partir de entonces el C.D.Mirandés se convertiría en dueño y señor del partido. Moha y Víctor Gómez ganaban protagonismo por derecha. Se entienden, se conocen, se buscan. Y se nota. De ahí nacería la falta que daría origen a una doble ocasión de Pablo Martínez que milagrosamente Dimitriesvki y el palo dejaban sin premio. Clarísimas.
La inercia continuaba y la producción ofensiva de los de José Alberto López, ya dirigiendo desde la banda, continuaba con más. Eran los mejores minutos de los rojillos sobre el verde.
Y en ese pasito adelante, en ese querer de un equipo inconformista, llegaría el gol. Peleaba Moha un balón dividido que acababa aprovechando Cristo para encañonar por bajo y sorprender por fin a Dimitrievski. Justo premio que llegaba en el minuto 72.
No cedieron los rojillos pese a la ventaja y siguieron por más. Más de Cristo, más de Meseguer, más de Mario Barco, más de todo el grupo que, una vez más, se dejaron todo para ganar en un estadio complicado, ante un rival de playoff, para situarse ya con 47 puntos en la tabla e "ir a por más en las nueve finales que restan". La próxima en Albacete.
