Tres meses después el C.D. Mirandés ha vuelto a la competición, en Anduva, ante el C.D. Numancia y con victoria (2-1), en un partido que se puso muy de cara para los rojillos y que se complicó mediada la segunda mitad tras la expulsión de Malsa.
Sin público en la grada y con el protocolo cumpliéndose epígrafe por epígrafe, Anduva volvía a vivir un nuevo derbi de LaLiga Smartbank en el que todo podía pasar. Y es que la ausencia de partidos previos ponía en incógnita el estado físico en el que llegaban ambos equipos a la cita.
Y sobre esas incertidumbres arrancó una primera mitad en la que, con el paso de los minutos, se iba desenmascarándo pequeñas dosis de realidad sobre el césped.
En ese sentido, los de Andoni Iraola repitieron una máxima que han seguido a lo largo de la temporada: ir de menos a más. Así, con un arranque algo titubeante en el que los visitantes eran dueños del esférico, los minutos fueron despertando a los rojillos.
Sin apenas ocasiones destacadas, a la media hora llegaría el primer bombazo del C.D. Mirandés. Un potente disparo de Marcos André desde fuera del area se colaba inapelable en la portería de Dani Barrio. Era el 1 a 0. Un auténtico golazo del brasileño.
Con esa ligera ventaja se llegó al descanso. Y tras la reanudación, un jugada en la que Merquelanz filtraba para Íñigo Vicente, este caía y el VAR revisaba un posible penalti que, minutos después, terminaría con lanzamiento y gol del irundarra. Su 12º tanto en LaLiga Smartbank esta temporada.
Sin embargo, lo que parecía un encuentro ya encarrilado se torció en el minuto 61 con la expulsión de Malsa que dejaba a los rojillos con un hombre menos para afrontar la última media hora de juego. Un mundo.
Y sobre esa superioridad el C.D. Numancia encontró el motivo que necesitaba para levantar de nuevo los ánimos y buscar la portería de un debutante Raúl Lizoain.
En el 82 llegaría el gol visitante, obra de Escassi, para dar aún más mordiente a un tramo final en el que los rojillos tuvieron que sufrir para resistir y poder sumar tres puntos que acercan el objetivo de la permanencia y dejan al equipo a dos puntos del playoff de ascenso.
Y ahora a pensar en el jueves, en una nueva cita ante la S.D. Huesca.